Las exposiciones prolongadas al sol o al calor pueden tener como consecuencia, quemaduras e insolaciones. No
es necesaria la exposición solar directa, ya que también puede ocurrir
en lugares cerrados, con ambiente caluroso y húmedo y en los que corra
muy poco el aire.
Los niños, las personas de edad avanzada y las embarazadas son las más vulnerables.
Unas sencillas medidas de prevención, o una reacción adecuada y a tiempo, son fundamentales para poder disfrutar de una semana agostina divertida.
¿Cómo prevenirlo?
·
Use ropa
holgada, liviana, de algodón y colores claros.
·
Use con
frecuencia protector solar.
·
Evitar bebidas
muy frías, muy calientes, con cafeína y el azúcar en exceso
·
Evitar comidas
pesadas.
· Evitar bebidas
con alcohol ya que aumentan la temperatura corporal y las pérdidas de líquido.
· No es
conveniente tomar cerveza ante la sed y el calor por que se pierden líquidos
(deshidrata por tener efecto diurético).
·
Evitar la actividad física
intensa.
¿Cómo prevenirlo en los niños?
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Vestirlos con
ropa apropiada holgada, liviana, de algodón y colores claros.
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Bañarlos y
mojarles el cuerpo con frecuencia.
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Proponer juegos
tranquilos evitando que se agiten.
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Evitar que se
expongan al sol especialmente en el horario del mediodía.
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Recuerde ponerles
sombrero y ropa de manga larga si van a estar al sol.
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Use con
frecuencia protector solar.
Mantenerlos en lugares bien ventilados o con aire
cuando la temperatura ambiente es muy elevada.
Aprenda a vivir el verano con seguridad.